El diseño se centra en dos aros de plata de media caña que se entrelazan con gracia, añadiendo una dimensión de movimiento y dinamismo al colgante.
Estos aros no solo son visualmente atractivos, sino que también añaden textura y un contraste intrigante al conjunto.
En el corazón del colgante se encuentra una esfera de vidrio de Murano en un tono crema suave y cautivador. Con un diámetro de 1 cm, la esfera de vidrio irradia un encanto sutil y atemporal, capturando la luz de manera elegante y creando destellos de color que cambian con cada movimiento.
Los aros de plata, con diámetros de 1,3 y 2 cm respectivamente, enmarcan con precisión la esfera de vidrio, creando un equilibrio visual y una composición armoniosa. Esta combinación de elementos da como resultado una joya que es igualmente llamativa y refinada.
La pieza está cuidadosamente engarzada en una cadena de plata de 45 cm de longitud, que se asegura con un cierre de reasa también de plata. Esta atención meticulosa a los detalles asegura la calidad y la comodidad del diseño en su conjunto.